Querida Inés: Qué orgullo siento por haber sido tu alumna.Tus reflexiones sobre el dengue en relación a la educación son transferibles a la actual situación con la influenza A H1N1. Salvando la diferencia de que comenzó por los niños bien alimentados, cuidados y con atención médica. Pero pone en evidencia la falta de sensibilidad, conciencia social de los adultos y profundo individualismo. El día jueves con un caso confirmado en el colegio en que soy directora, más cinco en diagnóstico, asistí a una reunión en el Hospital Pirovano, en la que se me indicó la suspensión de clases hasta el 15/06. Se me caían lágrimas de dolor por el tiempo que los chicos estarán sin escolaridad y de bronca por la falta de sentido común de algunos adultos, que no respetan el aislamiento. Piensan que el foco está en el colegio, y cerrado éste continúan reuniéndose o asistiendo a lugares multitudinarios. Tenés razón, Inés, cuánta educación nos falta, desde lo actitudinal; pero como dice Sergio Bergman, también falta la construcción de una «espiritualidad cívica» que nos conduzca a la construcción del bien común. Con todo mi cariño y agradecimiento por la profunda formación que recibí en el Estudio.

Tu alumna ex alumna Graciela A. Benceny
Directora Escuela Primaria